Si usted va a ver la casa, hacer una oferta. No importa qué. (Si no tienen suficiente capital, no ha ido a verla en primer lugar.)
Mi papá siempre insiste en que hacer ofertas en propiedades incluso si no tengo ganas alguna a poseerlas. Y créanme, esto sucede a menudo. Vemos las propiedades que tienen diseños horribles, daños, vecinos trashy, olores tóxicos, extraños propietarios, inquilinos feroces, complementos funky, inexistente techos, basura apiladas tan alto que un acaparador daños disgustado, animal que parece imposible, and...well usted consigue la idea.
No importa cómo disgustado estoy con una casa, siempre hacer una oferta. La oferta suele ser bastante ridícula incluso para mis estándares.
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